Hola, you.
Hace una semana que volví a ser madre. Mis hijos se fueron a UK con N. a mitad de abril y volvieron el 3 de mayo. Más de dos semanas. Nunca había estado separada tanto tiempo. Y si bien lloré a mares cuando los dejé en Ezeiza, I was fine afterwards. En mi previo newsletter conté de las oleadas de dolor al extrañarlos pero la verdad es que me daba mucha tranquilidad saber que estaban pasándola tan bien allá, reencontrándose con primaje, amistades y familia. Y yo pude tener un break de la maternidad (y de todo lo que eso encierra) que, truth be said, me vino genial.
Me seguí despertando 7 am porque mi cuerpo ya está set up that way pero tuve tiempo para escuchar podcasts, mirar miles de Tiny Desks en YouTube, leer, socializar, ir al teatro y a museos, ver películas y documentales que tenía pendientes, salir a correr, jugar juegos de mesa, cocinar poco. Todo el tiempo tuve una sensación extraña, de liviandad, porque hace nueve años que mi vida tiene una ocupación central (mis hijos) que demanda mucho cuerpo y energía. Y eso siempre pasó fuera de Argentina así que estuve paseando por Buenos Aires no siendo madre y siendo turista: liviandad por mil. Una experiencia rara y hermosa que no sé cuando se va a repetir.
Anyway, ahora ya volvieron y yo volví a ser madre. En el medio murió Bergoglio, hubo un cónclave y asumió otro Papa. Y quería decir algo a propósito de eso porque con tanta revisión de la vida de Francisco me dio pena el hecho de que nunca visitó Argentina. El concepto migrantequenoregresa me atraviesa y el concepto migrantequemuereextranjero, también. Imagino que el tema de la muerte en otro país era algo que el tipo había asumido pero eso de nunca haber vuelto a pisar su país, pudiendo hacerlo, ¿qué onda? Entiendo las implicancias políticas de una visita siendo Papa, pero además de ser una figura pública, era una persona común y corriente. Y nunca más volvió. Crazy eh?
Es tan complejo el desarraigo. Justo ahora lo estamos repensando en mi taller para madres migrantes y ando más conectada con el tema. Una se va, se instala, capaz se reproduce, se enraiza más, en muchos casos se aburguesa, y se pregunta: ¿me quedo más tiempo, me vuelvo o mejor no me pregunto nada? Y oscilamos entre esos escenarios, day by day, month by month, year by year. Porque la migración es un camino lleno de bifurcaciones. Una vez que diste el salto, todo puede pasar. Y si desmigrás, como yo, todo puede pasar también porque ya lo hiciste todo and you know you can do it. Es inexplicable pero sabés que rearmarte es un arte que más o menos dominás.
BRIT ART
Hablando de Tiny Desk, te dejo esta joya de Coldplay, una de las British bands más populares de los últimos veinte años. Capítulo aparte lo bien que me cae Chris Martin. Por algún motivo que desconozco, nunca fui a verlos live pero tengo un marido que coincidió con Chris en un gig en algún lugar de Inglaterra y lo entrevistó para un programa de radio de su universidad. Coldplay era la banda telonera de otra y no los conocía ni su abuela pero N. charló con el frontman y publicó la entrevista pensando que no iban a llegar a ningún lado. As you now know, he was quite wrong. El show de Tiny Desk es cortito y hermoso, con un coro zarpado. Don’t miss it.
USEFUL WORD
Unwind: relax after a period of work or tension.
Unwind es bajar un cambio. Y eso fue lo que me trajeron mis vacaciones de madre. Dos semanas en donde pude bajar tensiones, reconectar conmigo misma: unwind. Los nueves meses que llevamos en Argentina fueron muy caóticos. No solo se nos invirtieron las estaciones, sino que se nos dio vuelta la rutina, el espacio y la economía. Y a mis hijos y a N.: el idioma. Una desregulación conmovedora que nos afectó física, emocional y mentalmente. Como si nos hubiera pasado un camión por encima, literally. Se que esa tensión va a seguir estando porque, de por sí, vivir en este momento en Argentina trabajando de manera independiente y con dos hijos es muy desestabilizante. Sumado a eso, todo el proceso de adaptación interno que es ongoing. Necesitábamos ese freno. Celebro que hayamos podido hacerlo, ellos allá y yo acá. Y te lo recomiendo, en la medida que puedas. Capaz es solo un detox de redes sociales, I don’t know, pero I highly recommend for you to unwind. En serio.
Ah. Y si llegaste hasta acá, te cuento que mi club de lectura es una hermosa manera de propiciar ese relajamiento. Leer ayuda a unwind. El tiempo se detiene, entrás en otro mundo y luego lo debatís en conversación con otras. Un verdadero remanso virtual. Come and join me!
Hasta la próxima, you.
P.D: Contestá si resonás :)